En el país de los seis millones de desempleados, llama la
atención la rapidez y la efectividad de ciertos individuos en conseguir buenas
colocaciones. El baboso Rato [Ver artículo], el piloto Carromero, el que se jodan consorte Güemes y la chulapa Esperanza Aguirre [Ver Artículo] , entre otros,
tienen actividades de prestigio y bien remuneradas.
Tengo un amigo con una trayectoria espectacular, el cual
lleva alrededor de tres años mendigando
puestos de trabajo, y los que ha obtenido han sido clavos ardiendo que no servían para nada. Lo que ocurre es que no
se encuentra dentro del establishment. [Ver Artículo]
La falta de ética y de vergüenza está instalada en nuestra
clase política, y nuestros dirigentes dedican su esfuerzo a ver como se colocan mejor ellos o sus allegados [Ver Artículo].
Después de haber oído esta tarde a Luis Conde, presidente de la empresa de la
empresa donde ha sido contratada la señora Aguirre como presidenta del consejo
asesor y a Soledad Becerril -Defensora del Pueblo de España-, en defensa y loas
el primero de la antigua Presidenta de la Comunidad de Madrid, y justificando
la segunda, las acciones del exconsejero de la misma Comunidad, no puedo más
que ir a vomitar al baño.
¿No era Esperanza Aguirre la que hablaba de mamandurrias? ¿Cómo es posible que el
estulto Carromero cobre más que un médico o un bombero, por poner dos ejemplos?
Parce que solo son ellos los válidos.
¡Qué asco me dan! Entiendo perfectamente el tiroteo con AK-47 de la sede del
partido del gobierno en Grecia.
¡VAYANSE A LA MIERDA DE UNA PUÑETERA VEZ!
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