Estos días escribía -¡Viva La Pepa!- sobre el marido de la señora Cospedal, Ignacio López del Hierro. Primero por su nombramiento como consejero de Red Eléctrica Española, con una remuneración de 180.000 € al año por asistir a 12 consejos, y segundo por su renuncia, o no permiso gubernamental al mismo.
El nepotismo de la señora presidenta de Castilla la Mancha se notaba, con los nombramientos de libre designación de su hermano y de su cónyuge. La sorpresa surgió el día después.
Vehículo del marido de Cospedal en zona restringida (Diario de Toledo) |
Sin embargo, las reservas sobre la voracidad de la señora de Albacete, no se hicieron de rogar. Resulta que las empresas Videac y Videoreport, pertenecientes ambas al Grupo de Comunicación Vértice 360, de cuyo Consejo de Administración forma parte su señor esposo, se han llevado 4 de las 7 adjudicaciones para la producción de programas de servicios informativos en Castilla la Mancha TV (CMT), con un valor de entre 422.000 € y 625.000 €.
¡Qué alegría que alboroto, otro perrito piloto! La poca vergüenza de esta gente no tiene límite. ¿Es esta la forma de “limpiar” las autonomías? ¿Es esta la forma de gobernar de “nuevo cuño”?
Está visto que el ping-pong funciona en política. Hoy me toca a mí, mañana a ti.
Muy importantes son las formas y éstas se han perdido en nuestra España hoy en día. Nuestros gobernantes me dan asco, pero más asco me dan aquellas personas que admiten y aplauden estas decisiones, con la disculpa peregrina de “que ya nos ha llegado la hora, porque los otros chuparon antes”.
Me repito mucho, lo sé, pero ¡Váyanse a la mierda!